Creemos en la justicia, en el respeto y en la dignidad. Un patrón es aquel que lo merece por su humanidad y equidad, no aquel que simplemente puede imponer su voluntad. No más líderes de poder y miedo. Exigimos líderes de respeto y apoyo. Merecemos ambientes laborales donde florezcamos, donde nuestro esfuerzo sea valorado, donde nuestro crecimiento sea incentivado. No aceptaremos menos.
Nos negamos a ser tratados como simples engranajes de una máquina. El trabajo no es un favor ni una caridad. Es un intercambio justo donde nuestro esfuerzo y dedicación deben ser recompensados con dignidad. Queremos relaciones recíprocas entre patrones y trabajadores. Relaciones de apoyo mutuo, de respeto, de humanidad. Mutualismo, no canibalismo. Sabemos que no existe empresa sin nosotros, los trabajadores. Somos el alma, el corazón y la columna vertebral de cada organización.
Rechazamos con toda nuestra fuerza la violencia en cualquiera de sus formas. Derrocaremos a cualquier empresa que perpetúe el abuso y la opresión. No toleraremos más el miedo, el terror y la injusticia. Los patrones que decidan seguir por el camino de la violencia tendrán que enfrentar las consecuencias. Publicaremos sus abusos, expondremos sus prácticas nefastas. No habrá lugar para la impunidad. Queremos espacios de trabajo seguros y libres de violencia. Trabajaremos sin descanso hasta erradicar todas las prácticas abusivas. Tolerancia cero para el abuso.
Nos unimos en solidaridad, en apoyo mutuo, en defensa colectiva. Nos protegeremos unos a otros, porque sabemos que en la unión está nuestra fuerza. No permitiremos que nos silencien. Alzaremos nuestras voces contra la opresión y la injusticia. No más silencio. No más miedo. Cada trabajador, cada voz cuenta. Empoderaremos a todos aquellos cuyos derechos han sido violados, cuya libertad ha sido restringida, cuya confianza ha sido traicionada.
Queremos una cultura laboral sana, sin espacio para el abuso. Rechazamos el discurso de odio. Promoveremos el respeto, la colaboración y la equidad en todos los niveles. Necesitamos un cambio profundo en nuestra cultura laboral. No más indiferencia. No más normalización del abuso. Transformaremos el silencio en acción. Lucharemos por un futuro donde el trabajo sea sinónimo de dignidad y respeto.
Este manifiesto es un grito de justicia, un compromiso con la dignidad humana.
① Íconos por @geoffreydorne ↗